En la
mitología griega Egiro era el sexto rey de Sición, hijo de
Telxión.
Heredó el trono cuando su padre se rebeló contra
Argos, que entonces dominaba todo el
Peloponeso, y mató al rey de esta ciudad,
Apis, muriendo posteriormente a manos de
Argos Panoptes, el gigante de los cien ojos, que vengaba así la muerte de este rey.
Tuvo un hijo llamado
Turímaco, que le sucedió.